Rozando el limite de lo prohibido


Mirame, date vuelta y mírame, date vuelta y volve por favor.Cuando quiero que alguien me mire no importa ninguna otra mirada, quiero esa mirada y ninguna más.Pido  a gritos desesperadamente que abra sus ojos y me miren, que me vea, que vea mi dolor y me comprendan.Hago enormes esfuerzos para no necesitar de nadie, para no necesitar de una mirada para existir. Pero soy esclavo de esa mirada, la necesito, como al aire. Hago cualquier cosa por atraer esa mirada, intento ponerme en el campo visual del otro, quisiera tener un reflector que me ilumine, quisiera brillar para ser mirada.Lo curioso es que los ojos que más me obsesionan son los que no me pueden mirar. Es imposible que me mire a una mirada vacía, vaciada. Pero lo quiero,quiero que me mire.